La historia de un hombre que por ser jefe de telégrafos en zona republicana le movilizaron durante la guerra como capitán de transmisiones. El poder que le confería el cargo le otorgó la facultad de salvar muchas vidas de la zona llamada «nacional» lo que le supuso represalias. Pero al acabar la guerra «incivil» y someterle a depuración, los avales de esa gente le salvaron la vida, aunque no fue obstáculo para que cumpliera varios años de prisión. No fue hasta los años 60 que le restituyeron sus derechos. Fue un hombre culto y bondadoso del que no se puede perder su memoria.
José Manuel Gómez (